Balaton realmente puede ser la Riviera arenosa
Cada vez más gobiernos locales empiezan a crear playas de arena en sus playas. Esta nueva tendencia llega con un consenso poco común y significativo, ya que beneficia tanto al turismo como al medio ambiente. Los que ya tienen playas de arena están satisfechos con el creciente número de visitantes, mientras que los demás esperan permisos, aunque estos proyectos no son baratos. El único obstáculo que queda son los pájaros.
Pronto los turistas sentirán un agradable crujido de la arena bajo sus pies en Fonyód. Como escribe I Love Balaton, se gastaron 400 millones de HUF en la reconstrucción (o profesionalmente: lijado) de la parte de 200 metros de longitud de la playa de Sándor-telepi. La planificación llevó varios años y hasta la playa se transportaron unos 2000 metros cúbicos de arena probada. Los trabajos avanzarán hacia el continente, se realizarán algunas bahías protegidas para minimizar la amenaza de erosión, explicó a Origo IstvánCsonki, director de Közép-dunántúliVízügyiIgazgatósá.
Hasta el momento dos disparos han tenido éxito.
El poder turístico de una playa de arena queda bien ilustrado con el ejemplo de Balatonlelle. A mediados de la década pasada, durante la construcción del puerto de yates, el alcalde tomó una decisión audaz y transportó los 62 mil metros cúbicos de arena arrancados durante las obras a una costa de 300 metros de largo. “Un lijado como este requiere mucho, pero así no le costó nada a la ciudad”, dijo sobre la idea el alcalde IstvánKenéz, el alcalde que se enteró. La playa no se creó entonces en tierra firme, sino que se rellenó el área anterior a la orilla de cemento. La protección de hormigón de la orilla se mantuvo, aunque está previsto retirarla, por lo que la playa obtendrá su forma final, que se adaptará a la normativa.
Como dijo el alcalde, “recibió tanto calor como frío” por la idea; sin embargo, las estadísticas demostraron que tenía razón. “Antes en un bonito día de verano había entre 2500 y 300 personas en la playa, ahora son unas 7000. Los ingresos se han triplicado y muchas familias con niños pequeños reservan alojamiento aquí por eso. Muchos preguntan antes de reservar ¿a qué distancia está la playa de arena? El mantenimiento de la costa tiene un coste evidentemente, pero “lo podemos solucionar nosotros solos. Cada mañana tenemos que limpiar la basura que llega de la costa norte”, dice el alcalde.
Otro éxito es la playa de Balatonfenyves, donde en 1037 el gobierno local creó dos playas de arena en la playa central de 2012 metros de longitud. Se quitaron el hormigón y las piedras, el lugar se rellenó con arena del Balatón (según las normas, sólo para ello se puede utilizar arena del lago).
La cadena ha recibido comentarios positivos en los últimos años y, aunque no hay datos exactos, es seguro que llegarán más familias con niños. Tras los primeros éxitos, nuevas ciudades decidieron lijar sus costas: Balatonfüred, Balatonfűzfő y Balatonszepezd recibieron permiso este año, mientras que otras esperan luz verde.
El nivel inusualmente bajo del agua dio la idea.
A la pregunta de por qué vuelve a ser popular el lijado, IstvánCsonki respondió que ya en los años 60 y 70 se lijaban las costas. La arena fue transportada con los barcos de Baharts desde el lago hasta la orilla (la costa artificial ya estaba terminada). Sin embargo, esta solución pronto fue olvidada, probablemente por motivos económicos. Lo que despertó el interés actual es el inusual nivel bajo del agua entre 2000 y 2004. Mientras que la mitad de los habitantes temían que el lago se secara por completo, la otra mitad cogió a sus hijos y los juguetes del arenero y se dirigió a la costa sur.
Tanto los padres como los niños disfrutaron de este estado inusual, podían tumbarse en los bancos de arena junto al agua, sin que sus padres tuvieran que vigilarlos desde detrás del hormigón y la piedra. "Los gobiernos locales tomaron la idea de que realmente tenían playas de arena, sólo tenían que construirlas", explica IstvánCsonki la razón detrás de este avance.
No puede haber playas de arena en todas partes
El gobierno húngaro no explota ninguna playa, el lijado de las costas fue decisión de las autoridades locales o de operadores privados. Ellos hacen los planos, la oficina responsable de aguas examina que las construcciones en el lecho de agua sean profesionales, si el resultado es sostenible y sólo dan permiso cuando todo está bien.
Según IstvánCsonki, para decidir los posibles lugares donde se puede lijar, “se requiere un muy buen experimento de mecánica de fluidos, principalmente porque alrededor del lago el viento dominante del norte-noroeste está cambiando”. El flujo de Balaton se ve frustrado, lo que contribuye a la deposición de arena fina en la costa sur por el flujo, mientras que en la costa norte, hay un material fino, parecido a un polvo, bajo los pies de los nadadores. “También es importante hacer una prueba de mecánica de fluidos antes de las decisiones finales porque el flujo puede llevarse la arena en una temporada. No importa en qué lugar se lijará: sólo son adecuadas aquellas orillas que estén en equilibrio o que puedan rellenarse. Además, es importante que las orillas arenosas estén rodeadas de juncos o protección artificial para evitar la salida de arena”, revela los principales detalles técnicos de Csonki.
Una playa de arena beneficia a todos
Inusualmente, la tendencia de volver a enarenar beneficia tanto al turismo como a la naturaleza, ya que restaura el estado natural y, por lo tanto, ayuda a la autolimpieza del agua, afirman los expertos. La costa sur fue durante siglos arenosa, parecida a la costa del mar, la costa norte era bastante fangosa. Gracias al turismo, después de unos 50 años, el lago recupera sus orillas que se parecen al estado original. “Pregunta importante, porque nuestro objetivo final es tener tantas costas naturales como sea posible”, coincide László G.-Tóth, director de MTA ÖkológiaiKutatóközpontBalatoniLimmológiaIntézet.
Mucho antes, el viento del norte creó pequeñas bahías de arena en la costa sur. Estas dunas de arena antes de la costa y la arena es buena para el paso de los peces, las partes muertas de las plantas fueron arrastradas a la orilla en otoño, donde podrían pudrirse (en esa época, las partes de cañas llegaban a la orilla más bien que las botellas de plástico). Cuando se completó el ferrocarril del sur, el Balaton fue trasladado “al interior”. En los años 60 y 70 se empezó a rellenar la costa y se construyó la protección costera, que para los residentes se materializó en enormes piedras y la orilla de hormigón.
Los pájaros podrían corromper este idilio
Los expertos dicen que la práctica demostrará si esta nueva tendencia nostálgica funcionará. Aunque László G-Tóth acoge con agrado la idea de volver a llenar arena, afirma que esto no provocará ningún cambio importante en el ecosistema de Balaton, a menos que haya al menos decenas de kilómetros de playas de arena. Él cree que esto tiene más perspectivas en la costa sur, pero durante un tiempo puede funcionar en la costa norte, aunque es posible que sea necesario rellenar la arena cada pocos años.
Según IstvánCsonki es importante que los gobiernos locales compartan experiencias entre sí. “Por cierto, la naturaleza sabría por sí sola qué hacer, pero no nos haría felices, porque de repente habrá agua en nuestras casas de fin de semana”, añade.
László G.-Tóth llama la atención sobre un aspecto higiénico:
“A los pájaros les gusta hacer caca en las playas de arena; esto hay que tenerlo en cuenta en verano, cuando hace calor”.
basado en el artículo de origo.hu
Traducido por Oliver Tamasi.
Foto: www.nlcafe.hu
Fuente: http://origo.hu/
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