El Fidesz acusa al partido Tisza de apoyar la adhesión acelerada de Ucrania a la UE.
"El Partido Tisza no puede negar la importancia de la entrada de Ucrania en la Unión Europea… en Bruselas, los eurodiputados de Tisza han apoyado una resolución sobre el presupuesto de la Unión Europea que incluye pasajes relacionados con Ucrania", dijo Csaba Dömötör, eurodiputado del partido gobernante Fidesz, en una conferencia de prensa en Budapest el miércoles.
Al aprobar la resolución, los eurodiputados de Tisza «votaron su apoyo total e incondicional a Ucrania... y votaron a favor de que la UE invierta aún más en Ucrania y que este país proceda a su adhesión a la UE», declaró el eurodiputado. Añadió que, según declaraciones de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, Ucrania podría obtener un procedimiento acelerado para convertirse en miembro con plenos derechos incluso antes de 2030.
Acusó a Tisza de intentar restar importancia al asunto. Dömotör advirtió que la posible adhesión de Ucrania, al ser “una cuestión que involucra miles de billones de florines”, podría tener un impacto fundamental en las oportunidades de la economía europea y húngara.
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Cualquiera con un par de neuronas semifuncionales sabe que Peter Magyar hace lo que le dicen sus patrocinadores. Y como sus patrocinadores son la UE y otras entidades globalistas, socialistas y fascistas, hagan los cálculos.
No es Peter Margyar, es Peter van den Leyen. Eso es lo que te espera con él.
No creo que esta línea de ataque tenga ningún mérito, sobre todo después de que el Fidesz defendiera firmemente la integración de Ucrania en la UE durante tanto tiempo. La mayoría de los simpatizantes de Tisza ven con buenos ojos la adhesión de Ucrania a la UE. Es un intento del Fidesz de evitar que su base de seguidores deserte, pero esto no es una fuente importante de votos para Tisza y las próximas elecciones no se ganarán a base de robarle votos al Fidesz. Se trata de que los votantes de la oposición se unan en torno a Tisza y los motiven a acudir a las urnas si quieren ver un cambio en 2026. En realidad, las mejores posibilidades del Fidesz residirían en mejorar su juego en lugar de lanzar interminables campañas de desprestigio contra la oposición, pero lo han dejado pasar demasiado tiempo, con solo un año por delante y un agujero demasiado profundo para salir de él.