Orbán: 'Sin familias y niños, una comunidad nacional puede acabar desapareciendo'
Sin familias e hijos, una comunidad nacional podría terminar desapareciendo, dijo el primer ministro Viktor Orbán en un discurso ante el III Cumbre Demográfica de Budapest el jueves. “Y si una nación desaparece, algo insustituible desaparece del mundo”, dijo en el acto realizado en el Bazar Várkert, donde dijo que uno de los objetivos del Estado y tarea del gobierno es llevar a cabo una política demográfica vigorosa.
El primer ministro dijo que la "solución de la inmigración" y el "argumento verde sin sentido de que la Tierra estaría mejor con menos nacimientos" estaban fuera de discusión en lo que respecta al tema de la demografía.
Dijo que el esquema de apoyo familiar de Hungría solo alcanzaría un punto de inflexión cuando aquellos que decidan tener hijos disfrutaran de un nivel de vida más alto que si hubieran optado por no tener hijos.
La política familiar de Hungría se basa en el concepto y la convicción de que todo niño tiene derecho a tener un padre y una madre., dijo Orbán y que una familia y los hijos son prerrequisitos de “la reproducción biológica de una comunidad nacional”.
El modelo húngaro de apoyo a la familia se basa en una base que tiene “una naturaleza constitucional”, dijo Orbán, y agregó que esto era esencial para seguir una política familiar a largo plazo.
Estos fundamentos constitucionales protegen a Hungría contra fallos judiciales que son perjudiciales para las familias y contra los intentos de organizaciones internacionales, ONG y redes "anti-familia" de "penetrar" en los asuntos estatales y la toma de decisiones del país, dijo el primer ministro.
Una buena política familiar también necesita fundamentos económicos, dijo Orbán, y señaló que las asignaciones en el presupuesto central para apoyar a las familias se han duplicado en los últimos diez años. El primer ministro destacó la necesidad de un sistema de apoyo familiar predecible a largo plazo.
Orbán dijo que la clave del éxito de la política demográfica de Hungría fue “el cristianismo recuperando su fuerza en Europa”.
Socios en este esfuerzo como Serbia y la República Checa, representados en la cumbre a nivel presidencial y de primer ministro, ya están a bordo, agregó Orbán.
El primer ministro dijo que el éxito de la política demográfica estaría asegurado si la tasa de crecimiento económico anual del país superaba el promedio de la UE en al menos un 2 por ciento entre ahora y 2030, dijo Orbán.
Orbán dijo que había abundante escepticismo en Europa sobre si Hungría podría lograr su objetivo de política demográfica de una tasa de fertilidad de 2.1.
Pero esas personas dijeron lo mismo antes sobre otras medidas del gobierno húngaro, como "enviar a casa el FMI", introducir un impuesto bancario y un impuesto sobre la renta progresivo, imponer un impuesto a las empresas multinacionales, reducir los costos de los servicios públicos, crear un millón de empleos en diez años, detener la migración y construir un muro fronterizo, agregó.
Saludó al presidente serbio, Aleksandar Vucic, al primer ministro checo, Andrej Babis, y al ex primer ministro australiano, Tony Abott, que asisten a la cumbre.
Fuente: MTI
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